12 cosas que todo misionero debe saber hacer (edición viajero)

Hacemos muchas cosas diferentes como misioneros mientras seguimos el llamado de Dios hasta los confines de la tierra. Desde ser voluntario en un orfanato de Uganda, evangelizar en las calles de Tailandia o distribuir Biblias gratis en México, hay una cosa que está entretejida en todo esto: viajar.

Viajar puede parecer una “habilidad” tan básica que podrías hacer sin mucha preparación. ¿Qué tiene de difícil empacar, reservar un vuelo y presentarse en el aeropuerto de todos modos?

Sin importar si eres un experto en viajes o no, creemos que esta lista puede ayudarte a recordar algunos de los aspectos más comunes de los viajes que se olvidan fácilmente. (¡Como renovar tu pasaporte!)

1. Empacar de manera eficiente durante meses a la vez

Es importante empacar solo lo esencial; nunca se sabe cuándo tendrás que llevar todo a la espalda. Investiga tu destino, ya que el clima, la cultura y el acceso a los servicios de lavandería son factores que contribuyen a la hora de decidir qué traer.

Ah, y no olvides consultar los costos de documentar equipaje con tu aerolínea: ¡no quieres sorpresas en el aeropuerto!

2. Elegir calzado adecuado

Necesitas estar preparado para caminar sobre montañas, calles empolvadas, a través de la jungla y por las bulliciosas avenidas de la ciudad. No importa a qué país viajes, asegúrate de elegir el calzado adecuado.

Debes cuidar bien tus pies y tu cuerpo, así que elige algo protector y duradero con el que puedas caminar cómodamente durante largos períodos de tiempo.

3. Reservar un vuelo

Quizás esto parezca obvio, pero definitivamente es una habilidad que debes tener como misionero. Saber cómo encontrar los precios e itinerarios más baratos te ayudará a aprender a recorrer el mundo con facilidad.

Una cosa importante que mencionar: en la mayoría de los casos, necesitarás una tarjeta de crédito para reservar un vuelo, ¡así que recuerda eso cuando estás buscando los mejores boletos!

Si estás buscando más ayuda en esta área, ¡echa un vistazo a este blog que redactamos con 8 consejos para encontrar vuelos baratos!

4. Solicitar (o renovar) tu pasaporte

Tu pasaporte es lo que te da acceso al mundo y te permite cruzar fronteras internacionales. ¡No podrás salir de tu país de origen sin uno! Asegúrate de tramitarlo lo antes posible para evitar el estrés de obtener uno en el último momento.

Y si ya tienes un pasaporte, no olvides renovarlo antes de que expire. Lo más ideal es hacerlo durante un viaje a tu país de origen, pero si no, tu embajada más cercana debería poder ayudarte.

5. Solicitar (o renovar) tu visa de viaje

Hablando de documentos de viaje, necesitarás saber qué visas se requieren para obtener acceso a las naciones a las que viajarás. No quieres llegar al aeropuerto solo para que se te niegue el embarque porque no tienes la visa de viaje adecuada.

Cada país tiene sus propias leyes con respecto a qué nacionalidades necesitan visa o no, qué tipos de visa están disponibles y cuánto tiempo puedes permanecer en el país. Los sitios web como Passport Index son realmente útiles para averiguar qué debes hacer para tu situación específica.

6. Ubicar tu embajada o consulado más cercano

No importa dónde te encuentres en el mundo, se recomienda que sepas dónde se encuentra tu embajada o consulado más cercano. Estas oficinas podrán ayudarte si pierdes un pasaporte, si necesitas servicios notariales para un trámite en tu país de origen, así como también te ayudarán a brindarte ciertas protecciones mientras te encuentras en el extranjero.

Algunos gobiernos tienen un programa para registrar que viajarás para poder informarte sobre cualquier información de seguridad importante que necesites saber mientras estás fuera.

7. Pasar por la seguridad del aeropuerto rápidamente

Pasarás mucho tiempo en los aeropuertos como misionero, por lo que saber cómo facilitar esa experiencia te convertirá rápidamente en un viajero profesional.

En lugar de tener que vaciar tus bolsillos en un contenedor de seguridad, empaca todo lo que puedas en tu equipaje de mano antes de llegar a la línea de seguridad. Eso incluye tus monedas, llaves, billetera, teléfono celular, cinturón, todo. Confía en nosotros: pasarás por seguridad en poco tiempo.

8. Empacar bocadillos (para compartir)

Barras de granola, manzanas, zanahorias, mezcla de frutos secos, Gatorade; te lo agradecerás en esos largos e inesperados viajes en autobús o bote. Además, podrás bendecir a alguien más de tu equipo que no vino preparado pero que necesita un refrigerio.

9. Manejar con palanca de cambios

Independientemente de tu país de origen, aprender a conducir un vehículo con transmisión manual (palanca de cambios) será útil con más frecuencia de lo que piensas.

Dado que los misioneros siempre estamos en movimiento, a menudo necesitamos a alguien que pueda tomar el asiento del conductor y llevarnos a nuestro próximo destino. Entonces, cuando escuche a alguien decir: “¿Alguien sabe cómo manejar un palo?”, ¡Esa es tu señal para usar tus habilidades de manejo para la gloria de Dios!

10. Cambiar una llanta

Imagine esto: estás conduciendo por un camino de tierra lleno de baches en algún lugar del centro de Asia, cuando de repente tu llanta se sale de la rueda. Nadie sabe qué hacer. Pero espera, ¡ya lo has hecho antes! O al menos, has visto un tutorial de YouTube y puedes dar lo mejor de ti.

Pequeñas habilidades prácticas como cambiar una llanta pueden resultar útiles en el campo misional. Tal vez esta vez no necesites tus habilidades mecánicas básicas, pero si llega el día, podrás ser la respuesta.

11. Viajar en lo que sea

Los misioneros saben que debes estar dispuesto a hacer lo que sea necesario para llegar al lugar donde Dios te ha llamado para compartir el evangelio.

Desde aviones, autobuses y trenes hasta camellos, burros y barcos, ¡nunca se sabe cómo te puedes estar moviendo! Si puedes aprender a dormir en cualquiera de estos diferentes modos de viaje, ¡es una ventaja adicional!

12. Cambiar divisas

Puedes pensar que los dólares estadounidenses (USD) te llevarán a donde necesitas ir, sin importar en qué parte del mundo te encuentres. Pero, no es verdad.

Si bien es cierto que algunos países extranjeros aceptan dólares, pero no es el caso para todos. Aprender cómo (y dónde) cambiar dinero es importante, especialmente porque la mayoría del mundo todavía opera con efectivo.

Asegúrate de investigar las divisas de los países a los que viajarás para poder obtener efectivo con anticipación, si es posible. Cambiar efectivo en un aeropuerto suele ser lo más conveniente, aunque las tarifas pueden ser más altas. En caso de duda, pregúntale a uno de sus amigos locales cuál es el mejor lugar para cambiar dinero para no pagar demasiado.

Conclusión

Ahí lo tienes: ¡12 cosas que todo misionero viajero debería saber hacer!

Ahora deberías poder tomar tu pasaporte, reservar tu pasaje aéreo y hacer las maletas para la aventura de tu vida. ¡Puede comenzar en un avión en México y terminar en un camello en Egipto!

Ah, y una cosa más. No importa a dónde te lleven tus viajes misioneros, ¡no olvides empacar tu Biblia!